Tos de las perreras ¿Qué es?
La Tos de las perreras se asemeja al resfriado humano. Aunque no es peligrosa, sí es incómoda y muy contagiosa a otros animales, transmitiéndose a través de bacterias que expulsa el perro al toser.
Su nombre proviene de la facilidad que tiene para propagarse en las perreras y refugios, debido a la proximidad entre ellos, por lo que resulta muy común en esos espacios.
Su principal síntoma es la tos seca. Aunque a veces llegue a expulsar espuma por la boca y vomitar, no es lo más común, siendo consecuencias de la tos.
La Tos de las perreras suele remitir sin tratamiento, sin embargo, si la enfermedad se alarga o evoluciona presentando otros síntomas como fiebre o flemas de color verdoso, es necesario aplicar tratamiento.
¿Qué hago?
Lo primero es la valoración de un/una veterinari@ para saber cómo de avanzada se encuentra la enfermedad. Lo más habitual es el tratamiento con antibióticos y jarabes, pero debe decidirse en cada caso por un/a profesional.
Normalmente, una vez comenzado el tratamiento, los síntomas remiten en una semana.
Si el perro convive con otros canes, debemos intentar aislarlo del resto y estar atentos a posibles síntomas de la enfermedad en los otros perros.
Prevención. Vacunar
La forma más efectiva para combatir la enfermedad es la vacuna.
Lo habitual es que el perro sea vacunado por primera vez a los seis meses, y se repita anualmente, sobre todo en perros que padezca afeccciones pulmonares, cardiopatías o sean usuarios de residencias de animales u otros lugares dondes estén en contacto con otros perros.
La época en la que más incide la enfermedad es en otoño e invierno.
Cuidados del perro enfermo por la tos de las perreras
- Evitar el humo del tabaco en casa.
- Prepara en una cazuela hojas de eucalipto y/o menta, en agua muy caliente, para que emane vapor con la esencia de esas hirbas, loq ue calamará su tos y aumentará su bienestar.
- Atento al collar de su cuello, para evitar molestias en la zona. Lo mejor es un arnés o un pañuelo o collar ancho y mullido, y evitar tirones con la correa.
- El ejercicio físico no es recomendable cuando el perro sufre tos de las perreras, ya que entrará más aire y más rapido, irritando todavía más las vías respiratorias.
Si se moja o lo bañas, procupa secarlo muy bien, de forma que no quede humedad en su pelaje.